Concretamente la denuncia señalaba que rara vez se cumplen los descansos semanales que recoge el Convenio, y que los calendarios laborales no se elaboran en tiempo y forma, modificándose de forma totalmente arbitraria, lo que hace imposible la conciliación de la vida laboral y familiar del conjunto de la plantilla. La Inspección de Trabajo, que ha visitado el establecimiento en dos ocasiones, está pendiente de emitir el informe preceptivo.
Además, el escrito de denuncia relataba también amenazas y acciones de menosprecio hacia la plantilla con abuso de poder y llegando, en alguna ocasión, al maltrato verbal y psicológico. Estos son algunos de los hechos denunciados:
Más de 10 trabajadores han pasado por el puesto de trabajo de cafetería en los tres últimos años, marchándose de la empresa mediante un despido calificado siempre como improcedente o de manera voluntaria por la imposibilidad de aguantar las condiciones laborales.
Varios trabajadores son continuamente sancionados que, una vez reclamada la sanción ante el Juzgado de lo Social, provoca que la gerencia del Hotel la retire a la puerta del juzgado.
Los impagos injustificados son habituales a la hora de hacer frente a las indemnizaciones tras los despidos.
El despido de una trabajadora, estando de baja por riesgo por embarazo, fue considerado nulo, teniendo la empresa que readmitir a la trabajadora y pagarle los salarios mientras estuvo despedida. Recientemente esta misma trabajadora, junto con otra compañera, ha vuelto a ser despedida por motivos, en ambos casos, insostenibles. Este hecho ha provocado que la plantilla esté en cuadro, lo que hace que las condiciones laborales para los trabajadores que continúan en el Hotel sean insufribles.
CCOO quiere, con esta denuncia pública de los hechos, erradicar este tipo de prácticas y este modelo de empresario para el que no existen normas de ningún tipo y que no representa en ninguna medida a la mayoría del empresariado de la comarca.
