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Artículo New York Times. Declaraciones de J.M. Murcia
Mientras la economía de España cae, los atracos aumentan
El contratista de 52 años estaba desesperado por salvar su negocio. Sin poder pagar a sus trabajadores y enfrentado a la quiebra, Ausencio CG, como la policía española lo ha identificado, se dirigió al banco - pero no para un préstamo.
Cubriendo la punta de sus dedos con cinta quirúrgica y con una máscara
y un chaleco reflectante para desdibujar su imagen en las cámaras de
seguridad, el contratista presuntamente robó 80.000 euros en cuatro
bancos antes de ser detenido en su quinto intento cerca de Barcelona en
febrero.
El botín sumaba aproximadamente 115.000 dólares - la mitad de los
cuales procedía de su primer atraco, y lo utilizó para pagar a sus
trabajadores, de acuerdo con lo que declaró a la policía.
Ahora, en la cárcel en espera de juicio, el contratista, que es de
Lleida, una ciudad a unos 150 kilómetros al oeste de Barcelona, forma
parte de un grupo que está más activo que nunca en este país maltratado
por la recesión: los atracadores de bancos.
De hecho, con una tasa cercana al 20 por ciento de desempleo, la más
alta de Europa, y con una previsión de caída general de la economía de
un 4,2 por ciento para este año, los robos a entidades financieras en
2009 crecen un 20 por ciento por encima del ritmo a que lo hacían en
2007, según la Asociación Española de Banca.
"En los últimos meses, se ha puesto de manifiesto que España está
sufriendo un incremento de robos a entidades financieras", dijo
Francisco Pérez Abellán, jefe de departamento de criminología en la
Universidad Camilo José Cela de Madrid. "Estamos viendo a personas que
cometen delitos por necesidad, delincuentes por primera vez, que ya no
pueden seguir manteniendo su estilo de vida y pasan a la delincuencia".
En el área de Barcelona, en 2008, sólo el 7 por ciento de ladrones de
bancos pertenecían a este grupo de delincuentes novatos, según José
Luis Trapero, jefe de investigaciones de la policía catalana. Esa cifra
ha aumentado a 20 por ciento en lo que va de año.
Aunque los ejecutivos bancarios sostienen que no existe una relación
entre la caída de la economía y el aumento de los atracos bancarios,
muchos españoles dicen creer que las tendencias son algo más que una
coincidencia - entre ellos el sindicato que representa a los
trabajadores bancarios. Recientemente, ha convencido al Gobierno
español a clasificar como riesgo profesional los atracos a bancos.
"Hay desempleo, hay hambre y hay dinero en los bancos, y los tres
factores se combinan", dijo José Manuel Murcia, responsable de salud
laboral para el sector financiero de uno de los principales sindicatos,
CC OO (Confederación Sindical de Comisiones Obreras). "Los bancos
niegan el crédito, por lo que las empresas están teniendo problemas, lo
que genera más desempleo".
Y añadió: "La gente no puede pagar sus hipotecas. Por lo tanto, es más lógico robar un banco que una farmacia".
A pesar del aumento de los delincuentes novatos como el contratista,
los ejecutivos bancarios minimizan el aumento de atracos, y se resisten
a cualquier comparación con la era de la depresión en América, cuando
John Dillinger y otros delincuentes atrajeron la imaginación del
público.
"Es un mito urbano", dijo Eduardo Zamora, director de seguridad del
Banco Sabadell, el cuarto banco más grande de España. "Es posible que
sí tenga un efecto sobre otras partes de la sociedad, pero estoy
convencido de que la crisis económica no tiene ningún efecto sobre los
atracos".
Además, añadió el Sr. Zamora, el atraco a entidades financieras era
mucho más común en la década de los 80 y principios de los 90. Mientras
el número total de atracos bancarios no supere los 500 al año, dice el
Sr. Zamora dice, la situación "es estable y controlada".
En total, hubo 165 atracos en los cuatro primeros meses de 2009, según la Asociación Española de Banca.
Pero el Sr. Murcia, dijo que creía que el número real de robos a bancos
era superior a las cifras divulgadas por la asociación bancaria.
Además, dijo, sus trabajadores se encuentran en riesgo adicional debido
al aumento de la automatización y la proliferación de las sucursales
con sólo uno o dos empleados y el bloqueo de cajas fuertes que
requieren de una espera de 30 minutos antes de que se puedan abrir.
De hecho, Ausencio CG atracaba en oficinas con un solo empleado,
generalmente mujeres, y vigilaba cuidadosamente los movimientos de su
víctima, así como los locales del banco antes de realizar el atraco.
Según su declaración ante la policía española, el primer golpe de
Ausencio CG fue su mayor éxito, 50.000 euros que utilizó para pagar a
sus empleados. (La policía española policía no ha divulgado su nombre
completo, porque todavía está en espera de juicio.)
El botín de posteriores atracos lo destinó a sus proveedores, así como
para gastos de la familia, incluidos los estudios de su hija en
Londres, según la policía.
Mientras que el atracador de bancos típico es un español, de sexo
masculino, más de 35 años y que actúa por sí solo y lo hace no lejos de
casa, de acuerdo con el Sr. Pérez Abellán, profesor de criminología de
la Comunidad de Madrid, está emergiendo una nueva ola de atracadores.
Son delincuentes procedentes de los millones de trabajadores poco
cualificados que llegaron procedentes de América Latina, Europa
oriental y otros lugares de España antes de que el boom de la
construcción quebrase.
"Ha surgido una especie de mercado común, formado por personas de
diferentes países que aportan nuevas habilidades criminales pensadas
para aumentar el nivel de violencia y la velocidad del atraco al
banco", dijo el Sr. Pérez Abellán.
Por ejemplo, un grupo de cuatro pintores de América del Sur se
convirtieron en atracadores de bancos en marzo, secuestraron a un
director de banco y a su familia cerca de Barcelona y los retuvieron
toda la noche hasta que a la mañana siguiente obligaron al director a
abrir la caja y entregarles más de 150.000 euros, casi 215.000 dólares.
El grupo de pintores, que no tenía antecedentes penales en España, provenían de Brasil y Argentina.
Fueron detenidos el mes pasado, todavía vestidos con sus uniformes de
pintor y con un cubo de pintura junto con escopetas, pistolas y
munición en el asiento trasero de su coche cuando intentaban un último
robo antes de regresar a América del Sur con su botín.
Debido a que carecen de antecedentes penales, la detención de los
presuntos autores como Ausencio CG o los pintores sudamericanos es más
difícil, dijo el señor Trapero.
En 2007 se resolvieron el 87 por ciento de los atracos bancarios, en
comparación con el 72 por ciento el año pasado. Hasta ahora, en 2009,
poco menos de la mitad han terminado en arresto.
Pero el Sr. Trapero, un veterano 19 años intensamente dedicado a su labor, es paciente mientras sigue las pistas de su presa.
"A menudo lleva meses o incluso años resolver algunos casos", dijo.
"Hay algunos ladrones muy inteligentes cuidan casi cada detalle, pero
casi siempre se equivocan al final".
Informa Scott Sayare. New York Times
Trad. Miquel Lóriz COMFIA CCOO
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