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La dura realidad de las plantillas del sector de Comida Rápida ante el Covid-19
Ha sido necesaria una crisis sanitaria para que todos aquellos trabajos precarios no valorados ni reconocidos pasen de ser invisibles a ser considerados hoy trabajos esenciales. Entre estos nos encontramos la Comida Rápida, un sector cuyas condiciones laborales precarias CCOO denuncia desde hace años.
Mientras las empresas de comida rápida tienen la capacidad económica para mantenerse y sobrevivir a esta situación, las plantillas y sus familias cuyas condiciones de partida son mucho más precarias, están pasándolo realmente mal. La mayor parte de las y los trabajadores sobreviven día a día con contratos a tiempo parcial y salarios muy bajos que rozan el SMI.
“Desde que se decretó el Estado de Alarma y se aplicaron medidas como el cierre de colegios y posteriormente de los restaurantes, los trabajadores del sector hemos vivido situaciones de verdadero pánico e incertidumbre, todo ello derivado de la falta de información y transparencia de las empresas, además del miedo por nuestra salud y posteriormente hacia nuestra situación económica. Estas circunstancias han llevado a situaciones de pobreza extrema que nos obligan a subsistir teóricamente con la mitad del salario debido a los ERTEs realizados por las empresas y al retraso del pago de las prestaciones por desempleo.” Nos cuenta Dani, trabajador del sector.
CCOO denuncia la irresponsabilidad y falta de empatía hacia la plantilla por parte de las empresas que, siendo conocedores de toda esta situación, han pagado más tarde de lo habitual e incompletas las nóminas de Marzo ya que no se han remunerado los días reales trabajados, la totalidad de las horas complementarias, ni de los incentivos y bonos generados de los equipos gerenciales. Tampoco se han recibido las nóminas para poder comprobar y reclamar las diferencias. Estas situaciones las están viviendo las plantillas de empresas como Ginos, Vips, Dominos , Burger King, Tagliatella, KFC ..
Por todo ello, la realidad que están viviendo las plantillas de estas empresas es extremadamente dura ya que, en el mejor de los casos, durante mes y medio deben subsistir con un salario de 300/400 euros de media, y hacer frente con ello a gastos como hipotecas, alquileres, hijos a cargo, medicinas y demás necesidades básicas.
Existen, sin embargo, casos más extremos en los que la plantilla ni está en ERTE, ni se les está llamando a trabajar y la distribución de las horas contratadas es de computo anual. Por lo tanto, su salario en Abril será de 0 euros, como ocurre en Domino’s Pizza.
La reacción de las empresas ha sido la de dar la espalda a su plantilla cuando más lo necesita, negándose a complementar la prestación por desempleo, o a adelantar el pago de la misma. A excepción del Grupo Telepizza que tras las presiones por parte de CCOO, ha accedido a complementar la prestación por desempleo y Burger King Spain que da un primer paso facilitando adelantos de nóminas.
CCOO entiende que si el grupo Telepizza ha podido complementar la prestación , el resto de empresas pueden atender también a estas exigencias, dados los grandes beneficios que han obtenido años anteriores y teniendo en cuenta que se están desprendiendo de gastos como salarios y gran parte de cotizaciones y en algunos casos incluso del alquiler de locales como ha hecho Grupo Alsea.
El sindicato sabe que esta situación es excepcional y que ninguno tiene la fórmula exacta para dar solución a estos tiempos difíciles que estamos viviendo. Sin embargo, es el momento de que las empresas correspondan a los y las trabajadoras que son quienes mantienen a flote la empresa.
Esperamos que tanto ahora como al término de esta situación se empiece a reconocer la labor de la plantilla en el sector, a través de unas condiciones laborales que les permita vivir dignamente.
