En el momento actual vemos como se agravan las condiciones de vida y trabajo como consecuencia de la grave crisis económica, la destrucción de ocupación y las decisiones de los gobiernos que recortan derechos laborales, sociales y de ciudadanía. Estas, afectan especialmente a las mujeres, que sufrimos más paro, más precariedad y más discriminación salarial. Las medidas políticas ligadas al papel socialmente otorgado a las mujeres más dedicadas al cuidado, nos condena a una mayor carga de trabajo y condena nuestras oportunidades laborales y sociales.

Se debilitan los servicios públicos, la aplicación de la ley de dependencia, los servicios de protección social, la sanidad y la educación, la entrada en vigor de la Reforma Laboral aprovecha para reducir los derechos de conciliación, “y por otro lado se suprimen organismos institucionales que trabajaban por la igualdad, se aplaza de nueve la ampliación del permiso de paternidad, etc”

Estas y otras muchas decisiones denotan una evidente carece de interés al promover medidas que permitan avanzar en igualdad y corresponsabilidad, cuando había llegado el momento de tender al reparto igualitario del trabajo parece que la crisis se utiliza para justificar ataques contra la igualdad de oportunidades.

En la Asamblea del año pasado hablábamos de transformar la masculinidad socialmente establecida de redefinir los papeles que atribuimos a hombres y mujeres..., como sindicalistas con compromiso y vocación de cambiar el mundo que nos rodea hay que conocer la realidad para transformarla. Por este motivo y en este camino hacia una sociedad más justa e igualitaria es evidente que la educación, o más bien dicho, la coeducación tiene que jugar un papel clave y por eso hemos podido aprender mucho las experiencias de la ponente de la asamblea de este año Mercè Otero Vidal.

Secretaria de la Mujer - COMFIA-CCOO Catalunya