Martínez reclamó tanto al Banco de España como a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que si no existe transparencia en este proceso, por el momento opaco, que suspenda los derechos políticos de quien pueda adquirir las acciones en tales circunstancias, ya que tienen capacidad legal para hacerlo. "Se están jugando muchas cosas, porque es un banco muy importante en España, tradicionalmente muy rentable, bien capitalizado y en el que trabaja mucha gente".
La situación que se está creando distorsiona el mercado y ataca el valor del Popular, además de crear inquietud entre sus empleados, lo que contrasta con la realidad de un banco como éste "solvente y rentable".
Julio de 2008