Caos operativo: otra vez con el agua al cuello

Una vez más somos víctimas de planes e iniciativas enrevesadas de la empresa, de nuevos procedimientos operativos que se implantan de forma inesperada, sin contar con el feed-back de quien se sienta delante de la clientela, sin preocuparse de testar antes de ejecutar, y que nos llevan a una muerte anunciada, por acción u omisión.

Este artículo se publicó originalmente en G. Coop. Cajamar (CCOO en Grupo Cooperativo Cajamar) ,

Cada uno de estos nuevos “inventos” va desgastando y minando un poquito más, causando un profundo malestar y preocupación en la plantilla. Es evidente que llevamos tiempo experimentando cambios operativos, este último, por ejemplo, en las cuentas de autogestión, que están generando una serie de innumerables incidencias operativas. En particular, denunciamos el mal procedimiento en el cambio de esta tarifa, y de los parámetros que ha establecido la empresa para determinar el criterio de “cliente que históricamente no acude a la oficina”, ya que con realizar una simple transacción IC, se están penalizando las comisiones. Es evidente que donde se haya tomado esa decisión, no se tiene ninguna idea real del día a día, porque esa herramienta es la base de todas las gestiones comerciales de las oficinas.

Esta decisión, además de generar un malestar generalizado entre la clientela, también nos coloca en una posición incómoda como profesionales, al tener que lidiar con las quejas y frustraciones de quienes confían en nosotros para gestionar sus asuntos financieros.

Es inevitable que se nos apodere el hartazgo, al tener que lidiar con estas situaciones una y otra vez, sin una claridad suficiente sobre el motivo de tales cambios o las medidas para abordarlos adecuadamente. El estrés que esto conlleva ha permeado en nuestro ambiente laboral, afectando a nuestra motivación y nuestro bienestar psicosocial.

Desde CC.OO. os queremos recordar que somos más fuertes cuando nos mantenemos unidos y hacemos oír nuestra voz colectiva. Es por eso que instamos a todas y a todos a exigir un cambio de rumbo en cuanto a la implantación de los procesos, los cuales vivimos con incertidumbre y hasta con miedo. Cada nueva “ayuda” nos hunde en un nuevo caos operativo que se añade, suma y sigue, al caos ya existente.

Súmale a todo esto la pérdida de poder adquisitivo, la subida de los préstamos y un Convenio Colectivo que quieren degradar…y te das cuenta de que solo te queda la reivindicación seria y enérgica.

Desde CC.OO. vamos a alzar la voz nuevamente. ¡Por supuesto que vamos a alzar la voz! Debemos alzarla para exigir un trato justo y transparente por parte de la dirección de la empresa. Es hora de que se tome en cuenta a la plantilla en las decisiones que afectan directamente a la salud laboral.

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