Frente a la presión y ocurrencias diarias, sentido común

Ni los datos de colocación ni el compromiso de la plantilla justifican la actitud intolerable de una parte de la estructura

Sobran ocurrencias, como la reciente de teclear una orden por empleado y hora. A nadie se le va a sancionar por aplicar el sentido común, que obliga a obviar esta y otras estupideces; lo que sí puede tener consecuencias disciplinarias y no tiene justificación alguna es realizar malas prácticas, como teclear órdenes de compra sin la firma del cliente.

Este artículo se publicó originalmente en bankia (Seccion Sindical Bankia) ,

La paciencia de la plantilla se está agotando en la salida a Bolsa, por las presiones inaceptables e incidencias laborales de todo tipo que se están produciendo, todo ello con amenazas más o menos veladas.

Sobran ocurrencias, como la reciente de teclear una orden por empleado y hora. A nadie se le va a sancionar por aplicar el sentido común, que obliga a obviar esta y otras estupideces; lo que sí puede tener consecuencias disciplinarias y no tiene justificación alguna es realizar malas prácticas, como teclear órdenes de compra sin la firma del cliente.

Todas estas ocurrencias son innecesarias, muy poco profesionales, ponen palos en las ruedas y ponen en riesgo la propia colocación. Además, CC.OO. no vamos a tolerar que la presión que se está efectuando y la excepcionalidad del momento puedan servir como excusa para incumplir la normativa laboral o introducir cambios en el modelo de relaciones de trabajo en Bankia.

De entrada, el recurso a la amenaza es inadmisible por lo que, además de vigilar que no se lleve a la práctica y reservarnos la posibilidad de exigir responsabilidades, CC.OO. vamos a establecer contactos inmediatos con la alta Dirección, a fin de solicitar el cese inmediato de estas prácticas.

La plantilla está demostrando profesionalidad y compromiso; estamos poniendo toda la carne en el asador y, como consecuencia, los datos de colocación son positivos, según publica Bankia en su Extranet: a fecha de ayer, entre el 72% y el 83%, según el precio final.

Bankia debería replantearse la continuidad de directivos que se ponen nerviosos cuando sopla el viento; es sencillo navegar con el mar en calma, pero los buenos líderes se demuestran en momentos de dificultad. Como ejemplo positivo a seguir, reproducimos la nota que dirigió ayer un Director de Negocio a sus Direcciones de Zona:

Hoy los mercados estaban locos y a pesar de ello las órdenes de compra han seguido fluyendo (...) quiero felicitar a todos por el esfuerzo descomunal que están haciendo todas las personas de la Red y animaros a que continuéis sin desanimaros porque ya sabíamos que habría días buenos y otros no tanto. (...) sería bueno que ninguno tengamos duda de la bondad de nuestro proyecto (...) nuestro proyecto va más allá de los mínimos de capital exigidos por el B. España, y por ello debemos seguir tratando de incrementar el número de órdenes. No quiero a nadie sin dormir por el objetivo, esto es una labor de todos y no solo de una persona o una Oficina y en conjunto vamos moderadamente bien y esperanzados con conseguir nuestra meta. Vamos a dar el empujón final pero con serenidad, que se suelen hacer mejor las cosas. Ruego trasladéis mi agradecimiento a todas las Oficinas.

Hacemos, pues, un llamamiento a la sensatez y a la tranquilidad, sin perder por ello el pulso comercial.

13 de julio de 2011

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