Los consejos avalan la nueva caja de Castilla y León

Nace Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria, Caja de Ahorros y Monte de Piedad

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Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria, Caja de Ahorros y Monte de Piedad. Esa será la denominación social de la nueva entidad resultante de la fusión entre Caja España y Caja Duero. Los principales acuerdos para llevar a cabo la unión pasan por la ubicación en León de la sede social, la Presidencia y los órganos de Gobierno, mientras que la sede de la Dirección General se ubicará en Salamanca.
Una de los aspectos que parecía haber suscitado alguna de las tiranteces durante las negociaciones fue el departamento de Informática, sobre el que se decidió que ambas partes someterán a los estudios correspondientes por parte de los respectivos departamentos, con el asesoramiento y apoyo de consultores especializados la determinación de los elementos y componentes de la plataforma tecnológica que pueda resultar más eficiente, así como la segregación de las fusiones vinculadas a Informática que dé lugar a su distribución en dos divisiones: Informática (Caja Duero) y Logística (Caja España).
Las provincias que, en su día, fueron sede de entidades fundacionales de ambas cajas podrán ser cabeceras de áreas territoriales de la nueva entidad. En el caso de Caja España le correspondería a Valladolid, Zamora y Palencia, especialmente.
Las decisiones fueron comunicadas al Banco de España y a la Junta de Castilla y León. El proceso continuará ahora con la elaboración del documento para solicitar al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) 572 millones de euros, algo que llegará al Banco de España en los próximos 20 días. Posteriormente, a finales de febrero, los consejo de administración aprobarán la fusión final para llevarla ante las asambleas en abril.
El consejo de administración de la Caja España aprobó, por unanimidad, la propuesta conjunta de fusión. Al término de la reunión, el presidente de la entidad, Santos Llamas hizo especial hincapié en el cuidado y la preocupación que supone para el consejo de administración de la entidad el futuro de la plantilla actual. Santos Llamas explicó que los representantes de los trabajadores votaron a favor de la fusión y mandó un mensaje «de ánimo» a los empleados, dado que está previsto que el pacto laboral cuente con todo el apoyo del consejo «para llegar a buen fin». El presidente de la entidad leonesa de ahorro indicó que «es ahora cuando empieza la verdadera fusión, el verdadero camino» porque es el momento en el que los miembros del consejo han de trabajar «más juntos y unidos».
Santos Llamas subrayó el «hito» que supone el paso dado ya que «son las dos únicas cajas medianas que van a conseguir fusionarse para crear una grande, el primer caso a nivel nacional» algo que, para Llamas, los convierte en «pioneros» para lo bueno u para lo malo.
El dirigente de Caja España señaló además que cuando hablamos de la fusión «no hablamos sólo de León y Salamanca, sino de toda la comunidad» porque se va a conseguir «una caja de referencia a nivel nacional con fuerte implantación, solvencia y liquidez a nivel autonómico y de España».
El presidente
En cuanto al nombre del futuro presidente de la nueva entidad, Santos Llamas señaló que «no procede» en este momento decidirlo ya que «lo nombrará el consejo de los 34 consejeros que salga en su día».
A Llamas le parece un acuerdo bueno, porque nadie puede decir que ha perdido o ha ganado» por lo que no lo considera un pacto «de vencedores ni vencidos, sino de una fusión de una caja futura». «Hemos dejado personalismos y hemos conseguido un papel por el que nadie se puede sentir derrotado» matizó Santos Llamas quien comprende que «habrá gente que diga que bueno, otros malo y otros mediopensionista».
Tres votos en contra
El vicepresidente primero de Caja España y alcalde de León, Francisco Fernández, también mostró su satisfacción ante el proceso de fusión ya que «por una vez hemos ganado al futuro». Con las decisiones adoptadas, opina que «tenemos asegurado el presente y unas grandes expectativas de futuro».
El consejo de administración de Caja Duero también refrendó ayer el acuerdo de fusión pactado el lunes con Caja España en el transcurso de una reunión extraordinaria que se prolongó durante casi cuatro horas y que finalmente sólo cosechó 13 de los 17 votos a favor. Se produjo una abstención por ausencia, la del empresario soriano Francisco Rubio y el voto en contra de los representantes de UGT, Agustín Prieto y Antonio Muñoz y el del vicepresidente tercero y representante de los impositores, Víctor Pedraz. No fue la única salvedad en Salamanca respecto a lo ocurrido más o menos al mismo tiempo en León. También el presidente de la entidad, Julio Fermoso insistió en varias ocasiones en una larga comparencia de prensa en que toda la estructura urdida hasta ahora quedará en «agua de borrajas» si finalmente no se produce el pacto laboral con los sindicatos.
En cualquier caso, Fermoso subrayó que «esto no es una fusión, sino el inicio de un proceso en el que todavía hay que dar muchos pasos», ya que además del pacto laboral es necesario el acuerdo en el plan de negocio y el refrendo definitivo del consejo de administración del próximo mes de febrero y de la asamblea.
Sin embargo, el presidente de Caja Duero defendió el acuerdo alcanzado con Caja España para crear «una entidad más solvente, fuerte, eficiente, viable y mejor posicionada», lo que supondría crear «la séptima caja de ahorros de España, hablamos de jugar en primera división, ya no estaríamos en el medio de la lista».
Fermoso aseguró que «se puede jugar dignamente en segunda división pero aquí ya hablamos de otra cosa, de poder hacer una entidad con un peso muy importante, desde luego con el liderazgo en Castilla y León y Extremadura y con negocio en toda España». Una caja resultante que «nos permitirá sacar la cabeza cuando haya pasado la crisis», afirmó.
En su comparecencia tras el consejo, el presidente de la entidad tuvo palabras de tranquilidad especialmente dedicada a los trabajadores, ya que además del necesario visto bueno de la mesa laboral, el preacuerdo de Tordesillas se traduce en que «no habrá ningún ERE, ningún despido y en ningún caso se contempla movilidad, ni mínima, ni máxima: ninguna».
En cuanto a la sensibilidad en Salamanca ante la fusión, Fermoso aseguró que en el acuerdo «conseguimos que sí se diera satisfacción a las líneas rojas de nuestra entidad», si bien señaló tener una sensación «agridulce», consecuencia de que «siempre que hay una fusión hay algún desgarro, algún roto».
De esta forma, el presidente destacó la ubicación en Salamanca de la «sala de máquinas» de la futura caja, « el núcleo del negocio», al contar con las sedes de la Dirección General y la Obra Social, además de la demandada sede de los servicios centrales de informática, aunque en este caso precisó que «todo el mundo va a tener que seguir trabajando donde está, en Soria, en Valladolid y sobre todo en León», donde se mantiene la sede de logística de la futura caja.
Asimismo, Fermoso subrayó que el acuerdo establece que Salamanca será la sede de las empresas participadas, lo que supone contar con la gestión de «la primera empresa de participaciones industriales, desde luego de Castilla y León y uno de los ámbitos de referencia nacional».

ACTIVOS: 46.802 millones de activos tendrá la caja resultante de la fusión. De ellos, 26.085 provienen de Caja España, y 20.716, de Caja Duero.

Denominación: La marca comercial se unificará en el plazo de dos años, periodo durante el que convivirán las dos. La nueva marca será acordada por ambas partes una vez finalizados los estudios pertinentes que se encarguen.

Sede: La sede social y la Presidencia se ubicarán en León. La sede de la Dirección General estará en Salamanca, donde se reunirá el comité de dirección.

Otros órganos: La Comisión de Control, el Consejo de Administración y sus Comisiones Delegadas de Auditoría y Retribuciones se reunirán habitualmente en León. La Comisión Ejecutiva del Consejo de Administración y sus Comisiones Delegadas de Inversiones y de Obra Social se reunirán habitualmente en Salamanca.

Asamblea: La Asamblea General se reunirá de forma alternativa en Salamanca y León, y se compondrá de 320 miembros, 160 por cada entidad.

Servicios centrales: Se distribuyen de la siguiente forma:

Caja Duero: Negocio (red comercial, banca privada, banca de empresas, negocio inmobiliario, desarrollo de negocio, fondos de inversión, compañías de seguros y pensiones), planificación y control (intervención general, control de gestión y planificación, operaciones y auditoría), empresas participadas, obra social, informática y comunicación y relaciones Institucionales.

Caja España: riesgos, financiero, gabinete de integración y relaciones con el Banco de España, logística y desarrollo organizativo.

Obra social: La dirección de la obra social se establecerá en Salamanca. Se realizará una gestión descentralizada de su presupuesto al 50% y con especial atención a las provincias de origen de las cajas.

Informática: Ambas partes someterán a los estudios de consultores especializados, elegidos de común acuerdo, la determinación de la plataforma tecnológica que pueda resultar más eficiente, así como la segregación de las funciones vinculadas a informática que dé lugar a su distribución en dos divisiones: Informática (Caja Duero) y Logística (Caja España).

ACUERDOS DEL PACTO DE TORDESILLAS

MIGUEL ÁNGEL PÉREZ LAMAS Y FRANCISCO GÓMEZ | LEÓN / SALAMANCA.

El Norte de Castilla