Las condiciones laborales de las camareras de pisos, conseguidas tras años de lucha, han empeorado drásticamente desde que la práctica de externalizar servicios se ha extendido entre las empresas hoteleras.

Las camareras de pisos han pasado de limpiar 10-15 habitaciones por día a 20-25. Los hoteles llevan años reduciendo costes y ahora cada trabajadora hace el trabajo de dos. Algunos hoteles han ido todavía más allá externalizando el departamento de pios. Es decir, una trabajadora haciendo el trabajo de dos por un 40% menos de sueldo.

Tener un exceso de trabajo y querer hacerlo lo mejor posible genera mucha tensión. Un día tras otro. A esto hay que sumarle los movimientos repetitivos y la exigencia física de una actividad en la que hay que trabajar sin descanso, porque los y las clientas no pueden llegar a su habitación del hotel y que esté desordenada o sucia.

Trastornos musculo esqueléticos, estrés, cansancio? El exceso de carga de trabajo y las reducciones de personal o de horas contratadas hacen mella en los y las trabajadoras de Restauración Colectiva. Al exceso de trabajo se suman la responsabilidad de trabajar con colectivos como niños, ancianos o enfermos, en muchos casos.

Buena parte de las personas que trabajan en el sector de Restauración Colectiva, son fijas discontinuas. Acaba el curso o la temporada y se van al paro... y, con un poco de suerte, les vuelven a contratar cuando comienza u nuevo curso o temporada.

En el sector de Restauración Colectiva la mayoría de las personas trabajan a tiempo parcial. Están generalizados los contratos de 2 o 3 horas al día. Hasta que se firmó el I Convenio Estatal de Restauración Colectiva se contrataba por una hora o menos al día, algo que, gracias a la Negociación Colectiva, ya no es posible.

La inmensa mayoría de las y los trabajadores de grandes almacenes está contratado a tiempo parcial. Los horarios, turnos y jornadas que establecen sus empresas no les permite tener otro trabajo que pueda complementar su sueldo y tras muchos años de trabajo solo pueden aspirar a pensiones mínimas.

Para las personas que trabajan en grandes almacenes resulta muy complicado llegar a fin de mes. Un salario medio de 15.000 euros al año es difícil de estirar, sobretodo si lo congelan año tras año. Ya ni siquiera cobran por trabajar domingos o festivos

Jornadas que te obligan a estar 10 o 12 horas en el puesto de trabajo, calendarios que se modifican con horas de antelación, temporadas en las que llegan a trabajar 14 días seguidos sin descanso, trabajar domingos y festivos sin cobrarlos...Las personas que trabajan en los grandes almacenes tiene muy difícil conciliar su vida laboral con la personal o la laboral.