Adaptación del puesto de trabajo

La adaptación del puesto de trabajo consiste en eliminar barreras y adaptar el puesto al trabajador y no al contrario. Algunas de las adaptaciones más frecuentes son:

  • Equipos o elementos de trabajo: Como trabajador puede que necesites algún tipo de adaptación ergonómica (silla con respaldo ajustable, reposapiés, atril, soportes, reposa muñecas, cojín lumbar, etc.) o relacionada con su discapacidad (pantallas adaptadas, sistemas de lectura de texto?).
  • Condiciones físicas del puesto de trabajo y del entorno: Algunos factores ambientales puede que te sean molestos: como la iluminación (para que sea mas homogénea y no produzca brillos), el ruido (si necesitas algún tipo de casco más especifico, como casco doble), etc.
  • Condiciones organizativas: Si por tus circunstancias crees necesitar alguna adaptación más específica, y el servicio mancomunado de prevención así lo dictamina, se puede acordar alguna condición en cuanto a ritmo de trabajo, pausas y descansos, etc.

 

Cómo solicitar una adaptación

Si tienes discapacidad: Antes de que transcurra un mes desde tu incorporación, el Técnico de Prevención de Riesgos Laborales de la empresa, acompañado de los Delegados de Prevención, pasarán a realizar una evaluación inicial del puesto de trabajo donde se detectarán las necesidades específicas que puedas tener y se propondrán las adaptaciones que requieran.


En caso de que posteriormente a tu incorporación te surgiesen necesidades nuevas, puedes solicitar que se realice una reevaluación de tu caso.

 

 

 

Si no tienes discapacidad: Para solicitar una adaptación, necesitas un informe médico que lo especifique, este informe lo puedes solicitar a tu médico de cabecera o especialista, o bien al médico de empresa.


Tu colaboración con las delegadas y delegados de CCOO es muy importante, ya que si tienes alguna dificultad para acceder o utilizar las instalaciones de la empresa, puedes hacernos llegar tus sugerencias o necesidades y así eliminar esas barreras.