En los últimos diez años el índice de productividad por trabajador ha aumentado considerablemente, interviniendo para ello varios factores como son la bajada consecutiva de tasas fiscales sobre el precio del cartón o unidad de juego, que ha pasado en pocos años del 22% sobre el valor facial del cartón en 2007 al 12% en 2016 y al 6%, en 2017 con el bingo Dinámico, a las salas que mantienen el 70% para premios. Por la incorporación de nuevos juegos que se comercializan en las salas, B3, Bingo Electrónico, y apuestas, con el consiguiente aumento de funciones. Y por el cierre de salas, con el consiguiente reparto de la venta global entre menos establecimientos y una reducción considerable de plantillas en las salas que actualmente operan.
En 2007 se encontraban abiertas al público un total de 69 salas, que daban trabajo aproximadamente a 2.200 trabajadores/as, con una media estimada en torno a 32 trabajadores/as por sala; en la actualidad existen 46 salas abiertas con una estimación de 1.200 trabajadores/as y una media de 26 por sala, lo que representa en torno a un 45% menos de empleo entre los años 2007 y 2016. Así las salas actualmente funcionando emplean un 18% menos de trabajadores que estas mismas empleaban en 2007.
En septiembre se inicia la negociación del nuevo convenio laboral, en ultractividad desde enero de este año, donde CCOO y UGT apelan a la responsabilidad y al sentido común para revertir la precariedad existente y recuperar poder adquisitivo.
