Por otro lado, plantean establecer un horario flexible a los gestores, con 100 tardes, y ampliar la movilidad geográfica al ámbito provincial. También cambiaría la clasificación de oficinas, eliminando subdirectores y segundos responsables en oficinas de menos de cuatro empleados, ampliando el periodo de consolidación de categoría y modificando las variables para determinar esta.
CCOO cree que la propuesta de Caixabank no busca sino llevar al límite la negociación para conseguir aplicar de forma unilateral estas medidas forzosas, tal y como prevé el procedimiento en caso de no llegar a un acuerdo. La próxima reunión está prevista para el 24 de enero, en la que el sindicato seguirá exigiendo la retirada de estos artículos para poder empezar a negociar, de buena fe, una reestructuración no traumática para la plantilla.