COMFIA-CCOO viene exponiendo públicamente su opinión, desde hace meses, acerca de los procesos de integración de Cajas para ganar tamaño, solvencia, rentabilidad y eficiencia ante un panorama difícil e incierto de unas entidades a las que les ha tocado de lleno la crisis financiera y económica y la consiguiente reducción de la actividad económica, además de unos futuros requerimientos de solvencia que se presentan de difícil cumplimiento.
Pero pasan los meses y los procesos se ralentizan o se transforman, sin que los trabajadores, muy directamente afectados por estos cambios que se ciernen sobre las Cajas, tengamos la más mínima participación en los procesos y en sus resultados; ni en cómo van a afectar a la naturaleza de las Cajas ni a las condiciones laborales de las plantillas.
A poco más de un trimestre del fin del plazo dado para acudir al FROB y, por tanto, del límite para decidir cada Caja qué va a hacer, es el momento de exigir a las direcciones de las Cajas ciertas medidas, íntimamente relacionadas con el futuro carácter de nuestras entidades y con el de sus trabajadores:
Claridad y transparencia: las direcciones de las Cajas han venido actuando con delegaciones amplias de los órganos de gobierno, amparándose en el necesario carácter secreto que deben de tener los contactos previos, pero ya ha pasado el suficiente tiempo para que quienes ostentan la representación social e institucional conozcan y decidan el futuro de sus entidades por ellos mismos.
Que se constituya la Mesa Laboral y que se nos dé previamente toda la información necesaria acerca de qué medidas proponen de reestructuración y ajuste.
Que se cierre el compromiso de mantenimiento del modelo jurídico y social de las Cajas, de forma que en los protocolos de integración queden fielmente reflejados los compromisos de adecuar las sociedades centrales al marco jurídico de las Cajas, tan pronto como se den los cambios normativos necesarios.
Que se defina el acuerdo laboral que establezca las condiciones de empleo, antes de por la vía de los hechos disminuir la capacidad instalada (oficinas y plantillas), dentro del marco de relaciones laborales de Ahorro.
Que se aclare en qué condiciones laborales quedarán la sociedad central, Asociaciones de Interés Económico que se puedan crear, etc., dentro igualmente el Convenio de Ahorro.
Si no se dan todas estas premisas de partida casi ya de llegada-, difícilmente COMFIA-CCOO podrá apoyar unos procesos que, siendo necesarios, no deben de amparar intereses ajenos a las Cajas y a sus plantillas, ni dar carta de naturaleza a ajustes que no son debidos a la integración en sí misma, sino a deseos antiguos de recortar derechos laborales y de acabar con el modelo de participación social en los órganos de gobierno, de inclusión financiera y de obra social.
Desde CCOO en Caja Rioja creemos necesario que, tras haber anunciado CAI la búsqueda de un plan de viabilidad en solitario, nuestros dirigentes deben informar a los representantes de los trabajadores, y a la plantilla en general, en que situación queda nuestra entidad y cuales son los planes alternativos que se están barajando. La incertidumbre que hasta ahora vienen generando estos responsables, al no aportar prácticamente información relevante sobre el proceso de integración, afecta de forma negativa a la motivación de los empleados y nos hace dudar de la transparencia con que debería llevarse a cabo un proceso tan importante.
COMFIA-CCOO CAJA RIOJA
Pero pasan los meses y los procesos se ralentizan o se transforman, sin que los trabajadores, muy directamente afectados por estos cambios que se ciernen sobre las Cajas, tengamos la más mínima participación en los procesos y en sus resultados; ni en cómo van a afectar a la naturaleza de las Cajas ni a las condiciones laborales de las plantillas.
A poco más de un trimestre del fin del plazo dado para acudir al FROB y, por tanto, del límite para decidir cada Caja qué va a hacer, es el momento de exigir a las direcciones de las Cajas ciertas medidas, íntimamente relacionadas con el futuro carácter de nuestras entidades y con el de sus trabajadores:
Claridad y transparencia: las direcciones de las Cajas han venido actuando con delegaciones amplias de los órganos de gobierno, amparándose en el necesario carácter secreto que deben de tener los contactos previos, pero ya ha pasado el suficiente tiempo para que quienes ostentan la representación social e institucional conozcan y decidan el futuro de sus entidades por ellos mismos.
Que se constituya la Mesa Laboral y que se nos dé previamente toda la información necesaria acerca de qué medidas proponen de reestructuración y ajuste.
Que se cierre el compromiso de mantenimiento del modelo jurídico y social de las Cajas, de forma que en los protocolos de integración queden fielmente reflejados los compromisos de adecuar las sociedades centrales al marco jurídico de las Cajas, tan pronto como se den los cambios normativos necesarios.
Que se defina el acuerdo laboral que establezca las condiciones de empleo, antes de por la vía de los hechos disminuir la capacidad instalada (oficinas y plantillas), dentro del marco de relaciones laborales de Ahorro.
Que se aclare en qué condiciones laborales quedarán la sociedad central, Asociaciones de Interés Económico que se puedan crear, etc., dentro igualmente el Convenio de Ahorro.
Si no se dan todas estas premisas de partida casi ya de llegada-, difícilmente COMFIA-CCOO podrá apoyar unos procesos que, siendo necesarios, no deben de amparar intereses ajenos a las Cajas y a sus plantillas, ni dar carta de naturaleza a ajustes que no son debidos a la integración en sí misma, sino a deseos antiguos de recortar derechos laborales y de acabar con el modelo de participación social en los órganos de gobierno, de inclusión financiera y de obra social.
Desde CCOO en Caja Rioja creemos necesario que, tras haber anunciado CAI la búsqueda de un plan de viabilidad en solitario, nuestros dirigentes deben informar a los representantes de los trabajadores, y a la plantilla en general, en que situación queda nuestra entidad y cuales son los planes alternativos que se están barajando. La incertidumbre que hasta ahora vienen generando estos responsables, al no aportar prácticamente información relevante sobre el proceso de integración, afecta de forma negativa a la motivación de los empleados y nos hace dudar de la transparencia con que debería llevarse a cabo un proceso tan importante.
COMFIA-CCOO CAJA RIOJA
