Reconversión del sector

CECA prevé que las cajas culminen su ajuste de plantilla y oficinas este mismo año


Las entidades de ahorro seguirán reduciendo el tamaño de su red y de su plantilla hasta final de año. (Fuente: Cinco Días)

Las entidades de ahorro seguirán reduciendo el tamaño de su red y de su plantilla hasta final de año. Así lo hizo saber ayer el director general adjunto de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Antonio Romero. "Los ajustes se están intensificando en los últimos meses y al ritmo que van es posible que este año gran parte del proceso de reducción de la capacidad instalada esté acabado", afirmó tras intervenir en unas jornadas financieras organizadas por FIBA y Felaban.

El directivo destacó los esfuerzos realizados hasta la fecha. Así, el sector contaba a cierre del pasado marzo con 22.400 oficinas. Es decir, un 10% menos que las más de 25.000 sucursales que llegó a sumar en el tercer trimestre de 2008. El recorte de plantilla es comparable. Las entidades de ahorro han pasado de dar trabajo en 2008 a 135.600 personas a emplear a 124.800 trabajadores al acabar el primer trimestre del presente ejercicio. Es decir, la masa laboral ha menguado en 10.800 personas, un 8% del total.

Romero consideró difícil estimar hasta dónde han de llegar las cajas en su reconversión. Sin embargo, sí consideró que "a lo largo de este año debe haberse completado el ajuste porque ha de ir en paralelo al proceso de incremento de la solvencia".

Las nuevas exigencias de capital aprobadas el pasado febrero fijan como fecha límite para cumplir con las nuevas ratios de capital el próximo septiembre. Solo las cajas con avanzados trámites de salida a Bolsa pueden obtener una prórroga para cumplir las nuevas ratios en diciembre o, a más tardar, marzo. Para el ejecutivo de CECA, estas fechas pueden resultar "un buen umbral para hacer balance" sobre el proceso de reducción de red y plantilla.

El directivo declinó tanto comentar el resultado de las recientes elecciones locales y regionales como valorar sus posibles efectos para las cajas.

Fuente: Cinco Días