Las dos cajas conservarán su propia Obra Social dentro de su zona de influencia

Caja España-Duero y Unicaja aprueban integrarse para crear un nuevo banco


Los consejos de administración de Caja España-Duero y de Unicaja aprobaron ayer el protocolo de intenciones de integración, que prevé crear un banco, pero manteniendo el modelo de caja de ahorros. En Caja España-Duero el documento fue aprobado con el voto a favor de 29 consejeros, un voto en contra (el de CC.OO., por su oposición a la cláusula de supresión del acuerdo laboral) y tres abstenciones. Finalmente votaron a favor UGT y CSICA, que condicionó su apoyo a la fusión a la reducción de los órganos de gobierno y su coste, así como a firmar un pacto laboral sobre la base del vigente Acuerdo Laboral de Fusión.

Los consejos de administración de Caja España-Duero y de Unicaja aprobaron ayer el protocolo de intenciones de integración, que prevé crear un banco, pero manteniendo el modelo de caja de ahorros. En Caja España-Duero el documento fue aprobado con el voto a favor de 29 consejeros, un voto en contra (el de CC.OO., por su oposición a la cláusula de supresión del acuerdo laboral) y tres abstenciones. Finalmente votaron a favor UGT y CSICA, que condicionó su apoyo a la fusión a la reducción de los órganos de gobierno y su coste, así como a firmar un pacto laboral sobre la base del vigente Acuerdo Laboral de Fusión.

Por su parte en Unicaja se produjeron 23 votos a favor de la integración, entre ellos el de UGT; mientras que votaron en contra los dos representantes de CC.OO. y uno de Secar. También en la entidad malagueña los sindicatos (incluido Csica) han vinculado el apoyo al proceso a que existan garantías laborales.

El protocolo de integración tendrá que desarrollarse a partir de ahora, para formarlizar un contrato que deberá someterse de nuevo a la aprobación de los consejos de administración, y posteriormente a las respectivas asambleas generales.

El protocolo de intenciones de integración recoge las grandes líneas de actuación del proceso, entre las que figura, según la nota de prensa, la representación que ambas entidades tendrán en el banco que se constituya y que se encargará de la actividad financiera. Se mantiene la previsión de que la participación de Unicaja sea del 63%, y la de Caja España-Duero del 37% restante.

El presidente de Unicaja, Braulio Medel, sumirá la presidencia ejecutiva del futuro banco; mientras que el presidente de la caja con sede en León tendrá condición de vicepresidente ejecutivo y consejero delegado del banco.

El futuro banco que surja de la fusión tendrá su sede social en Málaga, aunque se mantendrán los servicios operativos centrales que «se corresponderán con las sedes operativas actuales de ambas cajas». Es decir, con León y Salamanca, y Málaga y Ronda, además de Madrid.

La Corporación Industrial tendrá su sede en Salamanca, si bien las previsiones de las entidades de vender la mayor parte de sus participaciones industriales dejarán este área con una importancia notablemente reducida.

Las dos cajas explicaron a través de notas de prensa que su unión presenta «una notable complementariedad, sinergias y diversificación del negocio, y una sólida posición de recursos propios de partida además de liderazgo en su zona de influencia.

M. J. Muñiz


Diario de León