¿Y ahora qué? II


El 26 de octubre pasado, emitíamos una circular titulada ¿Y ahora qué?. Después de seis meses seguimos sin tener respuesta a esa pregunta. De la incertidumbre de la venta hemos pasado a la incertidumbre de los rumores de una reestructuración anunciada y no ejecutada. Por eso tenemos que volver a preguntar ¿Y ahora qué? II.

Esta pregunta sigue teniendo sentido ya que de su respuesta sigue dependiendo nuestro futuro inmediato como entidad financiera y, sobre todo, el futuro de nuestras carreras profesionales, de nuestro empleo, y, como consecuencia, de nuestro futuro como personas en el más amplio sentido.

Pero tenemos otra pregunta: ¿dónde está el proyecto que dijeron haber presentado en Alemania? En España solo oímos los rumores mencionados, incluso algunos DDRR se permiten ?bromear? preguntando a los empleados qué oficinas cerrarían, pero no hay ningún tipo de información desde la Dirección del Banco. Desde Alemania, nos llega información sobre que esperaban que el proyecto acabase de concretar los detalles en el primer trimestre. Aunque parece ser que no ha sido así, ya que estamos finalizando el cuarto mes del año y seguimos sin noticias. ¿Habrá algo realmente?

Lo que si ha ocurrido desde nuestra circular de octubre es que se ha vendido la banca minorista de Polonia, se ha vendido la banca minorista de Portugal y no se ha vendido la banca minorista de India por la misma razón que no se vendió la banca minorista de España: porque no hubo ningún comprador que pagase el precio que pedía Deutsche Bank. Esa es la realidad compañeras y compañeros, no estamos vendidos porque la bolsa del comprador era pequeña. Y, a no ser que la Dirección del Banco nos explique algo creíble, esa es la situación en la que nos quedamos en octubre, y no nos hemos movido.

Lo que sí ha ocurrido desde octubre es un incremento presupuestario increíble acompañado de un aumento de la presión por parte de las distintas Direcciones Comerciales que raya en el paroxismo. Correos día sí y día también reclamando la venta o colocación de cualquier producto; reclamando incrementos de ratios que sólo sirven para llenar estadísticas sin beneficio; solicitando informes diarios de lo que han vendido y van a vender, etc.

No creemos que ese sea el estilo de gestión de personas adecuado para incentivar a una plantilla que es la responsable de que el negocio funcione en nuestro país, y de que Deutsche Bank figure siempre en los primeros puestos de la lista de los buenos servicios, es en la única. Si el futuro que nos espera es el de los últimos años, pero incrementado, no saldremos de donde estamos.

Nosotros seguimos estando convencidos que el Banco tiene un futuro en España. Pero para ello no se puede seguir haciendo lo mismo que hasta ahora.

  • Necesitamos un modelo de negocio claro y acorde con nuestras posibilidades. 
  • Necesitamos medios humanos suficientes para poder desarrollar el trabajo. 
  • Necesitamos medios tecnológicos dirigidos por profesionales en el tema, con soluciones integradas y sin fallos, no vale lo de ?vamos a ver si funciona con 30?. 
  • Dice el refrán que ?hechos son amores y no buenas razones?, y los hechos deben ser inversiones y un proyecto viable de negocio.

Desde CCOO estamos en disposición de hablar, con la debida profesionalidad y responsabilidad, de las opciones de futuro que podamos tener para que sigamos siendo una entidad financiera que tenga su espacio en el panorama bancario español y pueda mantener el empleo de los, posiblemente, mejores empleados de la banca.

CCOO, vuestro Sindicato, va a estar donde sea necesario para garantizar vuestra profesionalidad y vuestras condiciones laborales.