¿Y ahora qué?


Después de meses de incertidumbre ante las noticias que han ido apareciendo sobre el proceso de venta de la banca minorista de España, que ha finalizado con la decisión de no efectuar dicha venta, nos encontramos ante una pregunta esencial: ¿Y ahora qué? De la respuesta a esta pregunta dependerá nuestro futuro inmediato como entidad financiera y, sobre todo, el futuro de nuestras carreras profesionales, de nuestro empleo, y, como consecuencia, de nuestro futuro como personas en el más amplio sentido.

Por un lado se transmite a la plantilla que se avecina un proceso de reestructuración que puede ser doloroso e inmediato. No vamos a repetir los comentarios emitidos por Directivos de toda índole porque, en CCOO, tenemos un sentido de profesionalidad y responsabilidad bastante elevado.

Por otro lado, desde fuentes autorizadas, nos dicen que no hay ningún plan de reestructuración concreto encima de la mesa para aplicarlo de manera inmediata.

Esta dicotomía debe acabarse y aclararse. Si es cierto que no hay nada concreto encima de la mesa debemos condenar la irresponsabilidad de algunos Directivos que, posiblemente, tengan unos intereses poco confesables para hacer esas afirmaciones. Creemos que deben callar los que hablan por los codos y deben hablar los que ahora callan y pueden tener las claves de nuestro futuro.

Decíamos que algunas declaraciones pueden tener unos intereses poco confesables porque van acompañadas de un incremento de presión que va más allá de la realidad en la que nos encontramos. Parece que esas personas solo saben actuar en un ambiente de crisis y de extremos que no tienen en cuenta nuestra realidad actual. No son los gestores adecuados para el futuro.

Por nuestra parte estamos convencidos que el banco no puede seguir actuando como hasta ahora. Después de nueve años de una determinada manera de trabajar nos hemos encontrado ante la realidad de cuál es la opinión de Alemania sobre nosotros. No se puede seguir haciendo lo mismo que hasta ahora o nuestro futuro estará hipotecado por la coyuntura.

Algunos de esos Directivos habladores dicen que se ha presentado, en Alemania, un plan de negocio fantástico que ha evitado la venta. Para nosotros tener un plan de negocio es vital para poder establecer cuáles son las prioridades de presencia, dotación de personas, medios tecnológicos y objetivos claros y no variables como una veleta.

Como ya dijimos la pasada semana, desde CCOO estamos en disposición de hablar, con la debida profesionalidad y responsabilidad, de las opciones de futuro que podamos tener para que sigamos siendo una entidad financiera que tenga su espacio en el panorama bancario español y pueda mantener el empleo de los, posiblemente, mejores empleados de la banca.

CCOO, vuestro Sindicato, va a estar donde sea necesario para garantizar vuestra profesionalidad y vuestras condiciones laborales.