La Triple A de Abanca: Amenaza, Arbitrariedad, y Angustia


El Banco ha alcanzado la "triple A" implícita en su logotipo mucho antes de lo que se podía prever.

Esta nota no se la han otorgado las agencias de calificación (dos de las tres nos siguen incluyendo en el "grado especulativo"), es la que le otorgamos nosotros en materia de gestión de personal.

Amenaza como forma habitual de relación entre niveles. Amenazas con una mala evaluación; con no autorizar el parte de vacaciones; con cierre de oficinas; y la más grave de todas: "Ya sabes que se están haciendo despidos". Esta es la contestación cuando alguien disfruta de las medidas de conciliación, cuando no se está dispuesto a calentar la silla todas las tardes, cuando la consecución de los objetivos no son los esperados, cuando se intenta realizar la formación dentro del horario laboral....

Arbitrariedad como método de gestión. Arbitrariedad al asignar objetivos; al fijar el PDP individual; al adjudicar las operaciones formalizadas a cada gestor; al corregir la evaluación cualitativa; al realizar nombramientos de puestos cuya vacante no se ha convocado; al cubrir con nuevos empleados (bienvenidos todos ellos) puestos que se podrían haber cubierto internamente.....

Angustia como consecuencia de la situación profesional. De tener sobre tu cabeza un Plan de Trabajo (léase Seguimiento). De esta situación solo sale indemne el robot R4. La plantilla no puede evitar las repercusiones sobre la salud de esta gestión perniciosa. Por extensión, los afectados se sienten, cada vez más ajenos a un proyecto empresarial que destruye su vida personal.

No hay que descartar que el objetivo sea la cuarta A: la Aniquilación de la plantilla y su sustitución por un ejército de robots R4.

"Afíliate a CC.OO."