Mañana vencían los contratos de prácticas de primer año de dos empleadas en Madrid. La dirección de BBK ha decidido renovar sólo a una de ellas. Hasta ahora, y aunque era notorio el endurecimiento de los criterios de continuidad, las renovaciones se mantenían en un porcentaje superior al 60%. La compañera a la que no se la renovado tiene buenos informes por lo que su no renovación no parece estar relacionada con su valía profesional sino con la situación de crisis en el sector financiero.
Entendemos que la situación económica actual es complicada para las entidades financieras. El sector está recortando puestos de trabajo, se cierran oficinas, se plantean posibles nuevas intervenciones del Banco de España, Sin embargo, la dirección de BBK nos traslada todos los días que esta no es la situación de nuestra caja. En las oficinas estamos colocando estos días un cartel con un 1 gigante: somos la entidad más solvente posiblemente del mundo. Solvencia, Seguridad, Solidez, Satisfacción, Superación, Sobresaliente estas son las palabras del mencionado cartel.
Si esta es la situación de la BBK, no renovar a esta compañera implica un mensaje cuando menos contradictorio. En nuestra opinión, la realidad de BBK debe permitir abordar las actuales tensiones con políticas diferentes al del resto de las entidades y en particular sobre la estabilidad en el empleo.
La pérdida de profesionales válidos supone una descapitalización de la empresa que puede debilitar la estructura de gestión y la posibilidad de aprovechar, desde las fortalezas fundamentales de BBK, las oportunidades que otras entidades van a generar con su retirada de determinados mercados y nichos de negocio.
Creemos que BBK debe renovar al máximo posible de compañeros y compañeras porque puede permitírselo, porque necesitamos a estas personas para seguir creciendo. Porque esa sería la mejor prueba de que de verdad somos una caja diferente; esa sería la mejor prueba de confianza que podemos lanzar tanto a la plantilla como a los clientes.
En este orden vamos a dirigirnos a la dirección de la BBK para buscar un acuerdo de empleo que garantice el máximo número posible de renovaciones.
