Cada día estamos más convencidos, si cabe, que actualmente se dan las condiciones objetivas para abordar la solución del cierre de los sábados, y con esta confianza esta Sección Sindical se ha dirigido nuevamente a la Dirección de la Empresa, en varias ocasiones durante los meses de Julio y Agosto, para continuar las conversaciones, congeladas hace más de un año.
A fecha de hoy, y dando muestras, una vez más, de su falta de respeto a los requerimientos de los representantes de los trabajadores/as, guarda silencio sin ni si quiera molestarse en contestarnos diciéndonos, al menos, su disposición o no a abrir negociaciones para tratar con la representación sindical el cierre definitivo de las oficinas en Sábado.
Mientras, el sector se está moviendo a gran velocidad. Por ejemplo, la dirección del Santander no quiere esperar a que se vuelvan a abrir los sábados en el nuevo curso y por ello, casi nada más llegar de vacaciones, convocó a los sindicatos para reunirse con el sólo objetivo de negociar el cierre de las sucursales el penúltimo día de la semana.
Desde los sindicatos se asegura que si finalmente se sella un pacto entre la plantilla y el Santander su efecto provocará que tanto Popular como Banesto hagan lo mismo, lo que desembocará en que entidades como Sabadell, Pastor o Bankinter secunden también la medida.
Entonces ¿Qué pasa en Citibank? Esta empresa, además de ir contracorriente, parece no estar a la altura de las necesidades y no sabe o no quiere, lo cual sería mucho peor, materializar un importante ahorro de gastos. Nadie entiende la pasividad de la dirección manteniendo un horario tan poco eficiente como el que representan las oficinas abiertas los sábados.
Hemos de admitir que la actual situación en Citibank no pasa por sus mejores momentos y los problemas que nos acucian son profundos. Pero esto, entre otras decisiones, sí sería un paso importante para mejorar el clima laboral en Citibank y, de paso, ahorrar costes innecesarios.
Escuchando y trabajando en su consecución es como desaparecerá esa sensación de sacrificio personal absurdo que nos invade a tod@s durante los sábados y que nos impide sentirnos mínimamente satisfech@s con nuestras condiciones laborales.
El cierre de todos los sábados del año es posible, porque el sector así lo esta demostrando. Solamente hace falta voluntad, buena voluntad, y demostrar que se hace una gestión razonable y realmente se escucha la voz de los emplead@s (V.O.E).
Esperamos que la Empresa mantenga en todo momento una actitud receptiva, y que el diálogo nos permita alcanzar un acuerdo que dé respuesta definitiva a un tema tan sensible para la plantilla.
Seguiremos informando.
10 de Septiembre de 2009
