Las cifras de asesinadas nos estremecen, pero es necesario también visibilizar que las violencias machistas atañen a un número altísimo de mujeres supervivientes, mujeres que tienen mermados sus derechos, su libertad. En el ámbito de las empresas, centramos nuestras actuaciones en la aplicación de derechos laborales que garanticen a estas trabajadoras hacer compatible esta situación tan dramática con su seguridad, el mantenimiento de un puesto de trabajo que le aporte recursos económicos, de comunicación y de recuperación.
El acoso sexual y por razón de sexo, es otra de las formas en las que se manifiesta la violencia machista, que traspasa los muros de la empresa y contra la que actuamos en el desarrollo de protocolos que hagan intervenir a las empresas asumiendo la responsabilidad que les corresponde.