Desgraciadamente nada nuevo se puede contar de lo ocurrido en la última reunión de la comisión negociadora del II Convenio Colectivo,celebrada el pasado lunes, 8 de junio, y que se desarrolló bajo la sombra alargada de lo que han sido las peores pruebas de promoción y ascenso de categorías, que terminó monopolizando toda la sesión.
De esta forma, los sindicatos allí presentes manifestamos nuestro pesar y malestar por cómo se había desarrollado todo el proceso. Y es que, si en un principio, la parte social accedió a la creación de una comisión ad hoc, con el objeto de dinamizar la convocatoria de dichas pruebas, a la postre ésta ha sido un instrumento que, lejos de ser paritario, ha manejado a su antojo la patronal APR, que ha hecho y deshecho a su conveniencia, y con un coste económico y psicológico muy importante para todos los compañeros y compañeras de nuestro sector. A este respecto, y a falta todavía de los resultados definitivos, podemos aventurar que el porcentaje de aptos va a ser el más exiguo de toda la historia.
En este sentido, los sindicatos debemos ser autocríticos y asumir nuestra cuota de responsabilidad en todo este circo(aunque recordemos que COMFIA-CCOO no ha tenido presencia activa en dicha comisión) y trabajar concienzudamente para que este esperpento no vuelva a repetirse en el futuro.
Así pues, esta organización sindical,después de valorar todo lo ocurrido, entiende que una impugnación de dichas pruebas(por muchas irregularidades que se hayan cometido), poco o nada de beneficio puede aportar al colectivo en el corto plazo, y, en consecuencia, va a concentrar todo su esfuerzo en que las próximas convocatorias se realicen conforme a las normas establecidas en el vigente convenio colectivo,y bajo los principios de objetividad y equidad que, por imperativo legal, deben marcar la celebración de cualquier prueba de promoción.
Antes de finalizar la sesión, se volvió a reclamar a la patronal APR la necesidad de llegar a un acuerdo y avanzar en este eterno proceso de negociación, recordándole, a tal fin, todo el esfuerzo que la parte social había hecho por alcanzar un compromiso en materia retributiva y paliar así la cada vez más dramática situación en la que viven sumidos los empleados y empleadas de nuestro sector y transitar de esta forma hacia un nuevo y necesario marco convencional y económico, que posibilite garantizar a los trabajadores y trabajadoras de los Registros unas condiciones laborales acordes con la protección que, nuestro sistema de seguridad jurídica preventiva, aporta a la ciudadanía en general, y que obviamente debe pasar por garantizar unos salarios dignos para todos y cada uno de los empleados y empleadas,aunque esto suponga reducir el sobreelevado porcentaje de beneficio de estos funcionarios-empleadores, que, actualmente y sin ningún riesgo empresarial, tienen asegurado (pase lo que pase) el 60 % de los ingresos líquidos que generan los aranceles por la explotación de esta especie de concesión administrativa que son las oficinas registrales.
Como siempre, la patronal ha supeditado cualquier decisión a la previa valoración de su consejo directivoy, en consecuencia, ha pospuesto toda respuesta hasta la celebración de la próxima reunión de la mesa de negociación, que, de momento, ha quedado en principio suspendida hasta después del verano.
Ante esta nueva moratoria, en COMFIA-CCOO hemos de pensar formulas que dinamicen la negociación del Convenio dando traslado de toda esta problemática a la sociedad y, en particular, a la clase política,a cuyo fin ha tendido la mano al resto de las organizaciones sindicales presentes en la mesa para logar una más que deseable y aconsejable unidad de acción en este campo.
¡¡¡SEGUIREMOS INFORMANDO!!!
Necesitamos un Convenio Justo, Actual y de Progreso para los empleados y empleadas de los Registros, ¡Y LO NECESITAMOS YA!
