Para ilustrar el problema, reproducimos el escrito que nos ha enviado un Director exponiendo su parecer al respecto:
En estas fechas se están confeccionando los cuadros de vacaciones para su aprobación en Recursos Humanos. Todos los años se producen tensiones entre algunos directores de sucursal y los responsables de RRHH y Direcciones Regionales, debido a las indicaciones de estos últimos de que los directores tomen sus vacaciones en el mes de Agosto. Esto no es lo que se especifica en nuestro Convenio Colectivo y además choca frontalmente con LA CONCILIACIÓN DE LA VIDA FAMILIAR Y LABORAL. A menudo, debido a esta medida inflexible, el Director/a no puede coincidir en sus vacaciones con su pareja, con la frustración que ello supone al empleado y a su familia.
Entiendo que cuando nuestra Entidad designa a una persona como Director de Sucursal, es porque confía en su sentido de la responsabilidad, dada la importancia de dicho puesto de trabajo. El Director es uno de los primeros interesados (por no decir el primero) en la buena marcha del negocio que dirige. A su vez es el mayor conocedor de su unidad de negocio, de las peculiaridades de su clientela y de la plantilla de su oficina. Por tanto conoce perfectamente cómo afecta su ausencia al desarrollo del negocio que gestiona, sopesando si debe tomar unos días de vacaciones en junio, julio, agosto o septiembre, y tratando siempre de que el negocio se vea lo menos afectado posible. Además las plantillas de las oficinas están cada vez mas implicadas en la actividad comercial, reforzada por el nuevo PPAC, por lo que el pulso comercial no debería "venirse abajo" porque el Director tome unos días en una u otra fecha.
En la difícil época que vivimos, es de todos conocido el sobreesfuerzo que se nos ha solicitado reiteradamente y que toda la plantilla está realizando, en materia de horarios, sueldos... Creo que debería facilitarse al menos que todos los empleados puedan pasar unos días de vacaciones con sus familias, en las fechas que les interese, para compensar anímicamente tanto esfuerzo y dedicación en el resto del año
Convendría hacer hincapié en otro tema que se viene dando con cierta frecuencia. Depende de las zonas, pero nos encontramos con que en más de una sucursal tienen que ponerse de acuerdo para diseñar conjuntamente sus cuadros de vacaciones, ante la crónica escasez de plantillas, de manera que la sucursal "cabecera" ha de cubrir las vacaciones del personal de otra oficina. Esta situación es contraria a lo establecido en Convenio y provoca no pocos roces, además de un malestar generalizado.
Marzo 2011