Presiones y amenazas: Bankia da un paso, pero es insuficiente


Es necesario un Protocolo de actuación específico.

Bankia ha publicado en Intranet un documento actualizado con una relación de conductas no aceptadas por el banco que, según se indica, han dado lugar a sanciones disciplinarias.

Este documento es similar a otros anteriores emitidos con la colaboración de Auditoria Comercial, enumerando los motivos más frecuentes de aperturas de expedientes disciplinarios. A su vez, estos contenidos coinciden con los publicados por CC.OO. en diferentes ocasiones , a modo de prevención.

Esta vez, sin embargo, Bankia va un poco más allá e incluye el apartado denominado "Conductas inapropiadas respecto a otros empleados de la Entidad".

Gran parte de estos contenidos describen una serie de actitudes que la entidad considera indeseadas en un orden jerárquico, es decir, desde diferentes niveles de la estructura hacia las y los empleados subordinados.

La permanente denuncia de CC.OO. de una realidad inaceptable, como son las presiones, amenazas, humillaciones y, en general, las actitudes inapropiadas de diferentes responsables hacia sus subordinados, incluyendo a veces detalle de los hechos concretos, ha influido en la incorporación de estos comportamientos a las Conductas No aceptadas por Bankia.

A día de hoy, cuando las personas afectadas ponen en conocimiento la situación que padecen (y decimos bien, padecen) y la empresa decide actuar (cosa que ocurre en contadas ocasiones), el procedimiento adolece de serias deficiencias que, con frecuencia, comprometen a las y los afectados, en lugar de protegerlos.

La resolución de estos casos suele ser igualmente paradójica y desconcertante, pues casi siempre consiste en trasladar a la persona perjudicada (bien podemos denominarla como víctima), en lugar de actuar sobre la persona causante.

Valoramos la publicación de estas "Conductas inapropiadas" como un paso tímido e insuficiente, en el que es necesario profundizar. Porque una mera declaración de intenciones, una llamada a la prevención así como, llegado el caso, una respuesta demasiado difusa por parte de la empresa, no bastan para enfrentar situaciones de esta gravedad.

CC.OO. entiende que es necesario establecer y publicar un Protocolo de actuación específico para las que el propio banco ya denomina "Conductas inapropiadas respecto a otros empleados de la entidad" que, entre otras cosas, debe contemplar una protección efectiva de las víctimas.