Se multiplican los problemas en el País Valenciano, a dos meses de la integración.
La inminente integración operativa viene acompañada de un incremento de incidencias en toda la red procedente de Bancaja, y de manera especial en el territorio del País Valenciano. Buena parte de estas incidencias son perfectamente evitables.
Cada día se producen, en efecto, noticias relacionadas con la integración que se presentan casi como hechos consumados y acrecientan la presión sobre la plantilla. CC.OO. insistimos en denunciar el desequilibrio, la precipitación y el desorden que estamos sufriendo.
En particular, la forma en que la empresa aborda aspectos como la formación, las vacaciones de la plantilla y el futuro de los servicios centrales generan un profundo descontento entre las empleadas y los empleados.
Nunca ha sido necesario recordar a las y los trabajadores de esta empresa la importancia que tiene la formación, que entendemos que es beneficiosa para la empresa y para la persona, pero también voluntaria para el trabajador o trabajadora, en caso de realizarse fuera del horario de trabajo. En este caso, además, en que lo que se está abordando es una integración operativa, todas y todos asumimos la formación como algo necesario.
Dicho esto, es lamentable que Bankia no haya sabido arbitrar técnicamente la posibilidad de realizar a distancia buena parte de la formación necesaria para la integración, lo que afecta a amplios colectivos de empleados y empleadas (Asesores Comerciales, Gerentes, Cajeros, ACE de Banca Personal...), que deberán realizar mucha más formación en horario de tarde de la que hubiera sido necesario, con una mejor organización y herramientas.
Igualmente lamentable es el hecho de que numerosas empleadas y empleados procedentes tanto de Bancaja como de Caja Madrid tengan que desplazarse a distancias considerables para recibir formación y encuentren dificultades incluso para comer, debido a una mala planificación.
La excepcionalidad de los trabajos derivados de la integración no puede conllevar que se vulneren nuestros derechos, especialmente el de la conciliación familiar y el del conocimiento con suficiente antelación del disfrute de las vacaciones.
Además, el encadenamiento durante meses de situaciones excepcionales (parece que fue ayer el operativo de la OPS), con el consiguiente esfuerzo por parte de toda la plantilla, ya tiene secuelas en materia de salud laboral: aumento del estrés, ansiedad, situaciones de agotamiento...
Bankia no ha acordado ninguno de estos aspectos (formación, vacaciones...) con los sindicatos, sino que se ha limitado a informarnos de algunos de ellos, ante lo cual CC.OO. hemos solicitado más información, respeto a los derechos de la plantilla y una mejora y ampliación de las compensaciones planteadas por la empresa en algún caso.
Nada se sabe del futuro de los servicios centrales de Bankia en Valencia.
CC.OO. llevamos varios meses pidiendo explicaciones (en la mesa de seguimiento de los acuerdos laborales, ante RR.HH. y en el propio Consejo de Administración y Asamblea General de Bancaja) sobre la posible deslocalización de los servicios centrales, y en su caso, la dimensión final de éstos. Todavía no hemos recibido respuesta, por lo que las plantillas afectadas siguen sin saber qué será de su futuro laboral, una situación que a nuestro juicio es intolerable.
CC.OO. hemos exigido formación y garantías de igualdad de oportunidades para las y los profesionales que, estando en servicios centrales trabajando para la integración operativa de Bancaja, tengan que abandonar luego su puesto de trabajo para incorporarse a otros destinos.
CC.OO. hemos preguntado, a su vez, al nuevo director de sistemas (en las reuniones posteriores con la plantilla asociada a dicho departamento) sobre el futuro de los servicios centrales y le instamos a que comunicaran sin más dilaciones, cuál iba a ser el futuro de las plantillas.
A raíz de ello, desde otras instancias de la Dirección de Bankia se han celebrado nuevas reuniones, en las que se dijo que habría algo de deslocalización, sin precisar; y se sembró, más si cabe, la ansiedad en toda la plantilla, indicando que en un plazo breve y ambiguo, se llamaría a quienes tengan que abandonar servicios centrales. En definitiva, la empresa sigue sin ser capaz de concretar nada, ni añadir nada que CC.OO. no hayamos dicho en las asambleas de trabajadores que hemos venido celebrando.
Las incidencias de la integración que estamos padeciendo producen tensión, indignación e incertidumbre entre las y los profesionales, por lo que volvemos a exigir RESPETO HACIA UNA PLANTILLA QUE LO ESTÁ DANDO TODO.
17 de febrero de 2012
