? Cada vez más, observamos como el centro de decisión se está trasladando allende Despeñaperros con la consiguiente preocupación por nuestro futuro como trabajadores/as y por el de la propia entidad (los antecedentes de la gestión de Liberbank no son, precisamente, tranquilizadores).
Y NOS PREGUNTAMOS…
¿Era esta la responsabilidad social, la buena voluntad, el proyecto común que nuestros directivos aseguraron que iban a respetar? ¿Fue realmente Unicaja quién absorbió a Liberbank o fue al revés? ¿Cómo es posible que la gobernanza de una entidad recaiga en quien hundió otra? ¿Cómo el presidente de la fundación bancaria quita el gobierno a quienes han mantenido una entidad saneada junto con su plantilla y le entrega la gestión a los que no lograron mantener la suya? ¿Son estas las formas de hacer a las que la Fundación Unicaja va a dar carta de libertad para gestionar la nueva Entidad? ¿Las administraciones que tienen presencia en el Patronato de la Fundación, (Junta, Diputaciones, Cabildos) están de acuerdo en que se regale Unicaja a fondos de inversión que están actuando como buitres?
Por el bien de Unicaja, de su Clientela, de su plantilla, esperamos que no. Pero si son estas las formas, como ya dijimos ayer en la mesa de negociación, lamentablemente, CCOO tiene ya experiencia sobrada en acudir a la Audiencia Nacional para defender nuestros derechos. Y lo haremos…