Declaración de intenciones


Después de varias reuniones con la empresa sobre el registro de la jornada, donde hemos solicitado tener acceso al mismo tal y como nos otorga el Real Decreto-ley 8/2019 y ante la negativa de la empresa a facilitárnoslo, se interpuso una denuncia ante la Inspección de Trabajo a finales del mes de julio. En estos momentos nos encontramos a la espera de la actuación inspectora.


En una de dichas reuniones, la empresa nos entregó un documento informativo titulado “Pautas generales para la regulación del registro de la jornada de trabajo y la puesta a disposición de la Representación Legal de los Trabajadores” en el que plasman su criterio para la implantación del sistema. Desde la Sección Sindical de CCOO en Caser les remitimos un informe mostrando nuestro más rotundo desacuerdo con lo expuesto en el documento y requerimos a la empresa la apertura de una negociación colectiva con el fin de alcanzar un acuerdo para la organización y documentación del registro de jornada, tal como establece el artículo 34.9 del Estatuto de los Trabajadores

La empresa nos convocó el día 4 de septiembre para sentarnos a negociar este tema, a las tres secciones sindicales con más representatividad en Caser y a la Agrupación Independiente (que como ya hemos informado en otras ocasiones, solo representan a los trabajadores y trabajadoras del centro de trabajo de Madrid).

Seguimos sin entender por qué y con qué intenciones la empresa sigue queriendo incluir en las negociaciones que afectan a toda la plantilla de Caser, a una serie de personas que han sido elegidas única y exclusivamente para representar a los trabajadores y las trabajadoras de Madrid.

Seguimos sin entender, porqué y con qué intenciones, aun habiendo reconocido la empresa que dichas personas no están legitimadas para una negociación colectiva que afecte al conjunto de la plantilla de la empresa, nos sigue convocando de forma incorrecta a las reuniones, poniéndonos en una posición innecesaria de enfrentamiento con esa Agrupación.

No queremos ningún enfrentamiento con nadie y menos con un colectivo de compañeros que a su vez representan a parte de la plantilla de Caser. La única responsable de estas situaciones incómodas es la propia empresa que no observa el “principio de correspondencia” entre la representatividad que ostentan los representantes de los trabajadores a los que convoca y el ámbito que se pretende tratar.

Por tanto, desde CCOO no entendemos la insistencia e interés de la empresa en la presencia de esta Agrupación Independiente en reuniones para las que no está legitimada. Nunca la empresa había intervenido de esta manera para intentar facilitar el acceso a la negociación de una sección sindical que no pudiera negociar por falta de legitimidad.

Puedes sacar tus propias conclusiones.