19 de noviembre de 2021. La propuesta del sindicato incluye 11 áreas diferentes, con 5 grupos por área y 9 niveles diferentes por área . Este nuevo sistema amplía el número de áreas (de 4 a 11), adaptándose a los cambios que se han ido produciendo a lo largo de los últimos años en el sector. Se incluyen también 5 grupos (Técnico/a, Especialista, Experto/a, Jefatura y Dirección y Gerencia) con funciones propias y diferenciadas de cada área de actividad, con el objetivo de reflejar y poder identificar el puesto de trabajo y las funciones que se realizan con claridad. Dentro de cada área se han incluido 9 niveles diferentes dependiendo de los conocimientos, aptitudes y experiencia.
El objetivo de esto es responder a la necesidad de una clasificación profesional que refleje la realidad del sector, tanto a nivel de las definiciones que incluye, como de los niveles salariales asociados a cada área, grupo y nivel. Ya que las tablas salariales tres o cuatro veces por debajo de lo que realmente pagan las empresas, únicamente beneficia las empresas que quieren empobrecer a las plantillas para adjudicarse contratos a base de reducciones económicas temerarias.
Además, la clasificación del convenio actual no permite realizar correctamente el diagnóstico de situación, y en especial, el Registro Salarial y la Auditoría Retributiva, obligatorio de acuerdo con el Real Decreto 902/2020 de 13 de octubre, de igualdad retributiva entre mujeres y hombres. Paso previo a la elaboración de los planes de igualdad destinados a corregir, como obliga la ley, las discriminaciones salariales por razón de sexo.
Para el sindicato solo una clasificación del sector, clara y exhaustiva como la propuesta, podrá sacar a la luz y eliminar, sin ningún tipo de dudas, cualquier discriminación y, en especial, las diferencias reales que existen en las políticas retributivas entre hombres y mujeres.
Desde CCOO se apuesta por un convenio que regule la realidad del sector y que deje de servir como herramienta de precarización. Para ello será necesario trabajar sobre los siguientes pilares: un salario mínimo de convenio por encima del SMI, reducir la jornada anual (1.800 horas, por encima de la gran mayoría de convenios sectoriales), abordar la regulación del teletrabajo y una nueva clasificación profesional.